¿Bioterrorismo en México?

Una amiga me ha enviado unos enlaces de youtube que reproducen un programa de radio mexicano que te pone los pelos de punta. Son seis, los pondré más abajo en orden para que los podáis escuchar.

Allí hablan de bioterrorismo como la causa principal del brote de la cepa de Influenzavirus H1N1 que corre como la pólvora por nuestro planeta. Se acusa a las corporaciones farmacéuticas de ser los causantes de la propagación del mismo a través de las vacunaciones. Se dice que el cáncer, enfermedad cada vez más extendida en nuestra época, se inocula a los seres humanos a través de las campañas de vacunaciones masivas.

Se menciona a Henry Kissinger (no dejéis de leer la página de la wikipedia que enlazo con su nombre) como el precursor del uso de la guerra bacteriológica para poner fin a los problemas de superpoblación que podían acarrear dificultades para los EEUU. Kissinger, Premio Nobel de la Paz y uno de los mayores terroristas políticos de la historia de la humanidad (Vietnam, Laos, Camboya, Chile, Argentina, Uruguay, Timor Oriental, son solo algunos de los países que han sufrido las masacres perpetradas bajo sus auspicios), preparó un informe, el NSSM 200 (National Security Study Memo 200) en el que exponía «un extenso análisis de la situación demográfica mundial y soluciones para la estabilidad de los intereses de Estados Unidos relacionados con los recursos naturales que alimentaban las industrias norteamericanas.» 

En dicho informe se decía, básicamente, que había que reducir la población de los países menos desarrollados (Lesser Developed Countries o LDCs) para que no peligraran los intereses de las industrias yankis, siempre necesitadas de recursos que explotar en su beneficio. La población de estos países era vista como una «amenaza para su seguridad económica y política». La solución: controlar, reducir si era posible, la población en estos países. De ahí las políticas de ayuda económica a los países que toman medidas de control de la natalidad llevadas a cabo por instituciones benéficas como el terrorífico Banco Mundial y el negrísimo FMI.

Kissinger informó de que los países cuya natalidad resultaba más peligrosa para los intereses estadounidenses eran India, Bangladesh, Pakistán, Nigeria, México, Indonesia, Brasil, Filipinas, Tailandia, Egipto, Turquía, Etiopía, y Colombia, de ahí que instalaran bases militares en los que pudieron. En cuanto a México, Kissinger dijo textualmente: «La asistencia financiera (si es deseada por los países) debe llegar de otros donantes y/o desde el sector privado y organizaciones internacionales, muchas de las cuales reciben contribución de la AID [...] Por ejemplo, en México nuestra estrategia debe enfocarse en un trabajo primariamente a través de agencias privadas y organizaciones multilaterales para alentar al gobierno a que ponga más atención en la necesidad del control del crecimiento demográfico». Las consiguientes campañas de esterilización forzada a cambio de dinero en Perú eran disfrazadas sutilmente de «programas de planificación familiar»: 331.600 mujeres y 25.590 hombres fueron esterilizados durante la dictadura de Fujimori. A partir de ahí, de la campaña «esterilízate por alimentos», pasamos a prácticas de abortos, inoculación de virus como el Influenzavirus que asola México, leucemia, cáncer, sarcoma, y demás sutilezas.

La frase de Kissinger «la despoblación debería ser la más alta prioridad en la política de EE.UU. hacía el Tercer Mundo» define mucho su talante. Mirad qué listos eran: «Es vital que el esfuerzo en desarrollar y fortalecer un compromise mayor por parte de los líderes de los PMDs no sean percibidos por ellos como políticas de un país industrializados para mantenerlos subsumidos o para que los recursos sean usados por los países ricos. El desarrollo de tal percepción puede generar una reacción fuertemente adversa para la estabilidad de la población. Por ello, los Estados Unidos y otros países ricos deben tener cuidado en las políticas que aplicarán para los PMDs sean aceptables en esos países.» En otras palabras: SE HABLA DE ESCLAVIZAR A LOS PAÍSES POBRES PERO TENIENDO CUIDADO DE QUE NO SE NOTE EN EXCESO. Algo que, mucho me temo, no han conseguido, porque se les ve el plumero con suma facilidad.

Rodolfo Walsh ha realizado un interesantísimo análisis de dicho informe, cuya lectura os recomiendo a todos.

En el tercer vídeo, hacia el minuto seis, se menciona un método para combatir las enfermedades y las plagas la mar de interesante. Este punto me lo destacó mi informante, antes mencionada, y qué duda cabe que será del interés de muchos de vosotros. Se trata de un aceite conocido como ACEITE DE RATEROS. Esto es así, porque era el que empleaban los que rebuscaban objetos de valor en las zonas asoladas por la peste bubónica e incluso en las ropas de los cadáveres. El miedo a la peste impedía que nadie se acercara a aquellos lugares a sacar partido de los objetos de valor allí confinados, y eran estos grupos de rateros los que, protegidos exclusivamente con este aceite, que fabricaba un tío de ellos, salían inermes de sus más que provechosas expediciones. Según Aleksander, el investigador entrevistado, se ha comprobado que este aceite elimina más del 99% de las bacterias y virus de propagación aérea. Sus ingredientes son: clavo, romero, canela, limón, eucalipto y aceite de oliva. Se ha de poner a calentar el aceite a fuego muy bajo y se introduce en él los ingredientes durante mucho rato. El aceite resultante está impregnado de las hierbas y el limón, y hay que rociarse las zonas expuestas y usar un paño humedecido en él para respirar. 

El cuarto vídeo, amén de algunos problemas de sonido, cae un poco en contemplar la posibilidad de que los extraterrestres estén relacionados con este asunto. Qué decir al respecto: una tontá.

El quinto y el sexto son entrevistas alarmantes con oyentes sobre lo que podría llegar a suceder: ley marcial, cierre de carreteras, soldados acuartelados por doquier...

POST DATA: hace unos días desaparecieron en Fort Detrick, Maryland, el lugar al que hace referencia constantemente el investigador en la entrevista radiofónica, tres frascos con un peligroso virus... Noticia aquí. La conspiranoia no tiene fin, amigos de zombiblogia.

Aquí os los dejo.