Undead Knights y qué grande sería un Total War zombi

Undead Knights es un juego que no está recibiendo muy buenas críticas y en el que desempeñas el papel de un Big Daddy furioso que pretende acabar con un monarca y sus súbditos como si de un Fiddler's Green se tratara. Algo nada nuevo, dicho sea de paso: nunca olvidaremos a Stubbs, rebel without a pulse. Aunque ambientarlo en el medievo no deja de ser interesante.

El primer problema surge cuando nos preguntamos por qué debemos verificar nuestra edad para ver el vídeo promocional cuando se puede ver con total impunidad cómo el personaje de Grand Theft Auto patea alegremente prostitutas. Luego, otro problema es que salga solo para PSP, o eso tengo entendido.

En cuanto a los zombis se refiere, seguro que muchos de nosotros habríamos preferido lentos e inexorables muertos vivientes aunque, a buen seguro, podría resultar tedioso dirigir un puñado de caracoles podridos. Es como en L4D, que hay diferentes tipos de zombis para hacer más divertido encarnar a los zombis. Sin embargo, se debería lograr crear un juego en el que se comandara un ejército de miles de muertos vivientes de los lentos por un campo de batalla estilo Total War. Me muero por una expansión Total Zombie War. Ahora que Blogger in the Shadows y yo dominamos Europa con prusiana mano de hierro desde los Urales a París, el Empire se nos queda corto. No vendría mal un modo de juego en el que debieras dirigir ,o defender tu imperio de, manadas de no muertos como las que surgen hacia el final de The Walking Dead. Esas que se forman paulatinamente, zombi a zombi, merced a que los muertos tienden a dirigirse, bien sea por una suerte de instinto o por la detección a través de sus sentidos (que debieran estar mermados, ¿no?), en la dirección en la que se encuentran los seres vivos.

Imagino una pareja de exploradores a caballo regresando para informar de la posición exacta de la horda de muertos, media docena de escuadrones de infantería de línea y guardia republicana prusiana (y granaderos, pero sin granadas ya) apostados en lo alto de una colina surcada de vallas y tablones de madera que conforman calles en embudo ayudándose de los accidentes naturales del terreno, y por entre las calles restos de cadáveres en diferente grado de descomposición, pues no es la primera vez que atraen un horda zombi hasta estos pagos. Se puede apreciar el terror en los rostros de cada uno de los infantes, se escuchan rezos y alguna que otra promesa hecha al viento en caso de regresar con vida, pero todo se interrumpe de súbito con la primera salva de artillería, indicativo de que los muertos vivientes se encuentran cada vez más cerca...

Como véis, me ha impresionado tanto Undead Knights que no he parado de hablar de él en toda la entrada.